El Celta de Vigo se proclamó campeón de la Liga Fertiberia de Fútbol Indoor 2013 en
Puertollano tras derrotar al Valladolid en un partido marcado por la épica, la intensidad, el
espíritu de remontada y, especialmente, la figura de Jacobo Campos, quien volvió a ser una vez más
el mejor jugador de los celestes para, en esta ocasión, conseguir también el primer título del
Celta en la historia de la Liga Fertiberia.
Fue una final que comenzó con muchas cautelas y precauciones, pero que no tardó en abrir el
tarro de las esencias futbolísticas cuando tanto el Celta como el Valladolid se lanzaron al ataque
con una sucesión constante de ocasiones de gol y una gran deportividad que hicieron de la gran
final un espectáculo de gran envergadura.
A pesar de que tanto el Celta como el Valladolid habían protagonizado unos play-off marcados
por su acierto goleador -entre ambos marcaron más de 50 goles en cuartos de final y semifinal-,
desde el primer minuto ambos equipos se mostraron muy cautelosos a la hora de asumir riesgos,
conscientes de que en juego estaba nada menos que el título de campeón de la Liga Fertiberia de
Fútbol Indoor.
Eso no significa que no hubiera jugadas de ataque ni intenciones ofensivas, sino que los
jugadores preferían asegurar el pase para no perder el balón, lo que dio lugar a jugadas elaboradas
y triangulaciones rápidas que animaron a la grada.
Trofeos del torneo alevín e infantil
El encuentro se celebró en el pabellón “Antonio Rivilla”, en cuya pista durante toda
la tarde se llevaron a cabo las finales infantil y juvenil de fútbol sala del torneo que se ha
desarrollado en Puertollano a lo largo de la semana. En el intermedio del partido el concejal de
deportes,
Manuel Rodríguez Hidalgo, y
Pedro Guerrero, de la dirección comercial de Fertiberia hicieron entrega a los
primeros clasificados: Atlético Puertollano (campeón alevín y subcampeón infantil), CD Puertollano
(campeón infantil y subcampeón infantil), Repsol Petróleo (campeón memorial Antonio Rivilla) y
Fertiberia (subcampeón).
La gran final
Ambos conjuntos gozador de alternativas en las dos porterías, aunque el acierto de los
guardametas y la prematura lesión de Turiel, que tuvo que abandonar el terreno de juego a los pocos
minutos de dar comienzo el partido, marcaron el devenir del juego. Al Valladolid le costó reponerse
anímicamente de este lance y eso permitió al Celta hacerse con la posesión del balón y a mostrarse
más seguro. Los goles, en cambio, no llegaron hasta el minuto 9, cuando Tomás abrió el marcador.
Dos minutos más tarde empataba el Valladolid por mediación de Diego López.
A partir de ahí la igualdad volvió a instalarse en el Pabellón Antonio Rivilla de Puertollano
mientras crecía la rivalidad en el capítulo individual de Víctor y Jacobo Campos por erigirse en
las estrellas de sus respectivos equipos. No en vano ambos se jugaban el trofeo al mejor jugador de
la Liga Fertiberia. En medio de esta dinámica el Celta de Vigo se volvió a adelantar y a ampliar su
ventaja en el marcador para ponerse 3-1. Víctor, a cuatro minutos del descanso, se encargó de
acortar distancias.
En la segunda mitad, con 3-2 en el marcador, tanto el Valladolid como el Celta decidieron
abandonar las cautelas y se lanzaron al ataque. Los blanquivioletas juntaron a sus hombres más
técnicos -Víctor, Juan Carlos, Marcos y Chuchi Macón- para hacerse con el balón y crear peligro
mediante combinaciones rápidas, pero no contaba con que el Celta también hizo lo propio y mostró
todo su potencial. Fran Caínzos, con dos goles nada más renaudarse el partido -el segundo de ellos
de un potente zurdazo- y Fidalgo, con una vaselina, pusieron el marcador 6-2 cuando apenas se
habían cumplido cinco minutos de la segunda mitad.
El Celta exhibía la fortaleza que le hizo llegar a la final, pero el Valladolid no se arrugó
en ningún momento y, lejos de pensar en la distancia que tenía por delante, comenzó a mostrar su
mejor versión. Así, el segundo tiempo se convirtió en un partido de poder a poder, sin
especulaciones y con dos equipos totalmente lanzados en busca del gol. Ahí fue donde apareció la
figura de Víctor, que una vez más se convirtió en el estilete de un Valladolid que pasó de ir
perdiendo 7-4 y perder a Juan Carlos por lesión, a conseguir empatar el partido en el último
minuto.
La determinación con la que el Valladolid había logrado forzar la prórroga en los últimso 60
segundos del tiempo reglamentario espoleó al Celta de Vigo, que en el tiempo extra creó numerosas
ocasiones para haberse vuelto a adelantar en el marcador. Destacó especiamente una triple ocasión
de Fidalgo y un disparo de Quique.
Sin embargo fue el Valladolid quien sacó mejor provecho de su puntería materializando una
falta a través de Santi Cuesta. Incluso unos segundos después de hacer el 7-8 a punto estuvo de
sentenciar el choque con una nueva oportunidad. Pero del posible 7-9 que hubiera dado el título a
los blanquivioletas se pasó al 9-8 en los últimos instantes de la prórroga gracias a Jacobo Campos,
convertido no sólo en el héroe de la remontada, sino también en el jugador más destacado de la Liga
Fertiberia 2013.
Alineaciones
Celta de Vigo: Emilio (portero); Tomás, Bajcetic, Jacobo Campos y Otero. También
jugaron: Fran Caínzos, Quique, Fidalgo y Ratkovic. Entrenador: Moncho Carnero.
Valladolid: Rodri (portero); Turiel, Chuchi Macón, Víctor y Marcos. También
jugaron: Juan Carlos, Pereira, Santi Cuesta, Ferreras y Diego López. Entrenador: Ricardo Coque
Coria.
martes, 2 de julio de 2013
El Celta Vigo se proclama campeón en Puertollano de la liga de fútbol Indoor
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